viernes, 29 de junio de 2012

Te espero, te quiero.

Pienso en que la espera pronto será un regalo, pero no me convenzo, me mata seguir esperando. El tiempo transcurre llevándose mis ganas en tu costado. Mi felicidad se ha ido con tu presencia, sin darte cuenta me la has robado. Los días que estoy sin ti son eternidades que me han costado pasar. Eres esa dulce palabra que no puedo callar. Los segundos se hacen horas cuando siento que tú no estás. Creo que ya no puedo estar de pie aun sabiendo que volverás. Mi inspiración se ha perdido, no la encuentro en ningún lugar. Y si a ti tampoco te encuentro, por algo será. Te busco arrojando versos, te encuentro en soledad. No sé si algún día te he perdido, sólo sé que siempre te llamo y nunca te dignas a contestar. Te quiero aquí en silencio, te espero sin protestar.

viernes, 8 de junio de 2012

Empiezo de cero gracias a ti.

Y ahora vuelvo a sonreír, a pesar de todo.
Tú has conseguido que mi felicidad sea insensible al dolor., que con cada vez que me hables una nueva sonrisa vuelva a amanecer.
Porque eres especial, así, sin más.
Eres ese sueño que nunca pensé que se podía cumplir.
Un cuento de hadas, un príncipe azul; una fantasía que es un tanto real.
Y navegando en tus palabras encontré mi inspiración, fueron las olas de tu alma las que hicieron brotar toda esta pasión.
Conseguiste que mis sueños volvieran a brillar, que el fuego que me quemaba ya sólo me haga convivir con una luz que alumbra este amor que siento desde que vives en mí.
Amor sin más, sentimiento si tú estás.

Sin olvidar la amistad.


Búscame cuando se vaya, quizá me encuentres en su mirada.
Sabes que eras algo, pero ya no eres nada.
Sólo eres lo que éramos desde que me dedicabas esos momentos.
Canciones que son recuerdos de cosas que no volverán.
Secretos que te confesé con el miedo al perder tu confianza.
Historia de fantasía que guardé en una caja.
Amistad que pasó de ser todo a no ser casi nada.
Y hoy la pregunta es la respuesta que nunca me supiste dar, es la historia que yo quería y no me podías publicar.
Ya no me importa, o por lo menos como antes.
Ahora lo importante es que seamos felices, tú por un lado y yo por el mío.
Pero no olvidándonos ni dejando de lado esta amistad que nos unió un día.